El Colegio de Arquitectos de Ciudad Real, celebró su VI Marcha estacional de Primavera, por una ruta que circunda los campos próximos a la capital, no dejando por ello de sorprender a los participantes.
Partiendo del Embalse de Gasset, pletórico de agua, con un oleaje rizado por el viento, más propio de aguas marinas, a primeras horas de la mañana, cuando comienza el sol a inundar campos y sierras, comienza la Marcha por la vía pecuaria que discurre por las estribaciones de la Sierra del Gigante y Casalobos.
Acompañó un sol primaveral moderado y un viento fresco que permitió caminar sin agobios, por esta ruta renovada y adscrita hoy, a la Ruta del Quijote. Después, una visita obligada a las ruinas del Quinto del Congosto, al pié de Cerro Negro, donde se puede adivinar, a través de las mismas, el esplendor de la actividad campestre de otros tiempos. A partir de aquí, la ruta se dirige hacia el Suroeste, con el Río Bañuelo siempre presente a nuestra izquierda, el mismo que se encarga de hidratar los campos situados a ambos lados de sus riveras, hasta unir sus aguas con las del río madre, el Guadiana, justo en el Embalse de El Vicario.
Promediado ya el camino, se empieza a divisar, en el horizonte, la torre depósito del Embalse de El Vicario, cuya vista nos acompañará hasta la cabecera del mismo. Al igual que el Gasset, nos sorprende gratamente ver su alto nivel hídrico. Después de un largo trecho disfrutando de su entorno, decimos adiós al Vicario y nos hacemos acompañar, en adelante, por el río Guardiana, con sus riveras llenas de vida y de reses guadianesas, lanares y vacunas, pasteando en sus orillas, hasta llegar al antiguo puente que vadea el río, a la altura de Picón, el cual se encuentra en un estado de abandono absoluto y lamentable, por parte de los responsables de mantener nuestro Patrimonio más intrínseco. Ya cerca de Picón y a pesar del cansancio acumulado, no podemos resistir la tentación de visitar las ruinas de la Casa de Santa María, casa solariega que en otro tiempo debió de ser testigo y participe en las actividades campestres de la zona. La población de Picón sirvió de colofón a esta VI Marcha de Primavera.