Por Fernando Bernardo
La duodécima partida, hoy, ha sido dramática. El ruso Nepomniachtchi tuvo clara ventaja, pero tras alguna imprecisión se estableció la igualdad y un último error, abandonando la defensa del peón en e6, le llevó a la derrota.
Las imágenes de Nepo lamentándose y ocultando su cara entre sus brazos antes del abandono fueron impactantes y una muestra de la gran emoción que está deparando todo el encuentro. Recordaban la actitud de Ding Liren al comienzo del Torneo, cuando perdió la segunda partida. Ahora ya no hay marcha atrás. Sólo quedan 2 rondas y un desempate a partidas rápidas si persiste la igualdad.
La ciudad de Astaná se va preparando para la despedida. Varios torneos de ajedrez se celebran en paralelo al principal. En los parques comienza tímidamente la primavera. Lucen los grandes edificios de la Avenida del Millennium. Y las mezquitas, la iglesia ortodoxa de la Asunción y la Sinagoga cierran el círculo hacia el Palacio de la Paz y la Armonía, cuya gran Pirámide se muestra resplandeciente al otro lado del río.
Los dos jugadores, con sus equipos de analistas, estudian sus últimas estrategias para lograr el objetivo: ser campeón del mundo.
Fernando Bernardo
