El Consejo de Gobierno ha dado el visto bueno al decreto por el que se dispone el nombramiento de José Antonio Castro Osma como director gerente del organismo autónomo Agencia de Investigación e Innovación de Castilla-La Mancha, con sede en Puertollano (Ciudad Real).
Castro Osma es licenciado en Ciencias Químicas y Doctor en Catálisis Homogénea por la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), con Premio Extraordinario de Doctorado a la mejor Tesis en Ciencias. Desde el año 2021 es profesor titular en la Facultad de Farmacia de la UCLM.
La consejera de Igualdad y portavoz, Blanca Fernández, ha subrayado la importancia de esta agencia cuya misión pasa por fomentar la investigación científica y técnica, un “objetivo fundamental” que necesita de otros más secundarios, como son el seguimiento de las actuaciones financiadas y de su impacto, así como el asesoramiento a la Junta de Comunidades en la planificación de sus acciones e iniciativas en I+D+i.
En este sentido, Blanca Fernández ha confirmado que la Agencia de Investigación e Innovación de Castilla-La Mancha ya ha invertido seis millones en proyectos con una adquisición de compromisos mediante convenios, contratos y ayudas con la UCLM y la Universidad de Alcalá de Henares, además de una partida para el programa de retorno del talento.
Otro de los cometidos que tendrá la agencia con José Antonio Castro Osma al frente, tal y como ha apuntado la consejera y portavoz, será gestionar el Plan Regional de Investigación Científica, Desarrollo Tecnológico e Innovación (PRINCET) de Castilla-La Mancha, que contará en los próximos cuatro años con más de 1.100 millones de euros, tanto de procedencia pública como privada, con el objetivo compartido de impulsar la inversión en materia de investigación científica y técnica, el desarrollo tecnológico y la innovación con resultados desde el punto de vista social y económico.
Este plan cuenta con cuatro líneas estratégicas como son la consolidación e impulso al sistema de ciencia e innovación; la formación, impulso de la excelencia y capacitación continua; el apoyo a la inversión privada en I+D+i y al tejido empresarial innovador, la cooperación y la transferencia tecnológica; y el fomento de la investigación, desarrollo e innovación en zonas despobladas.
