Fulgencio Ruiz.-Las derechas y algunos más, siempre recurren a un argumento central para oponerse y justificar su oposición a negociar bilateralmente o acordar con respecto a Cataluña y su encaje en el estado español.
Cuando el gobierno de coalición y su presidente Sánchez, tomaron la decisión de resolver el problema político en Cataluña a través del dialogo y desjudicializar el proceso para recuperar la convivencia en Cataluña, cayeron truenos y relámpagos, las derechas y no solo las derechas, alertaron de que aquello era una concesión vergonzosa al independentismo y tacharon de traidor al gobierno de España.
Lo ocurrido después esta demostrando sobradamente lo acertado de aquella valiente decisión, Cataluña recupero la normalidad/convivencia y el independentismo que tanto creció en los años de Rajoy, hoy esta mas debilitado, incluso el primer partido en las ultimas elecciones ha sido el PSC, a la vez Cataluña sigue formando parte del estado español y aquellas voces conservadoras y rancias que anunciaban la ruptura y la quiebra de España, se han quedado en anuncios catastrofistas sin base alguna.
Ahora estamos en otra fase, esta llega al primer plano de la política española por el resultado de las elecciones generales del 23-J, la única posible mayoría que puede investir a un presidente del gobierno de España debe contar si o si, con los votos de los independentistas de Junts y de no lograr un pacto con ellos, habrá que convocar de nuevo a los españoles a las urnas.
Ante esta urgencia, el PP y Feijóo, que se someterá a la investidura los próximos 26 y 27 de Septiembre al ser propuesto por el jefe del estado, cambio su discurso con tímidos acercamientos, que de poco le han servido, dado que los nacionalistas vascos y los independentistas catalanes, han rechazado de plano negociar pactos con un partido que como el PP, tiene su principal apoyo en los fascistas de VOX, con los cuales gobierna en seis comunidades autónomas y cientos de Ayuntamientos en toda España.
Salvo algún tamayazo o compra de voluntades en los que las derechas ya tienen experiencias pasadas, el fracaso de Feijóo en la investidura está asegurado y una vez, resuelto este trámite se dará paso a la investidura o no, de verdad, la de Pedro Sanchez, las negociaciones parecen haber comenzado y salvo la foto con posada de Yolanda y Puigdemont en Bruselas, la discreción esta siendo la norma y ya se verán los resultados.
Las derechas y algunos más, otra vez, ponen el grito en el cielo y alertan de que Sanchez lo dará todo con tal de continuar en la Moncloa, de nuevo España se rompe y con la bajada de pantalones del gobierno los independentistas lograran sus objetivos de autodeterminación y de amnistía, la respuesta del gobierno es de tranquilidad, todo lo que se pueda acordar estará dentro de la Constitución y de las leyes.
Y es aquí en este escenario donde aparece con fuerza el argumento madre de las derechas para oponerse a cualquier acuerdo que facilite la investidura de Pedro Sanchez, argumento que pone el foco en la venta del bienestar y derechos de los españoles que se serán intercambiados por los siete votos de Junts y así Sanchez será presidente cuatro años más y los independentistas lograran la autodeterminación para Cataluña…Y tan contentos.
¿Desiguales o diferentes?, ¿Qué tiene de cierto que un posible pacto perjudicará a los ciudadanos del resto de España y nos hará más desiguales?
¿Acaso hoy o hace 50 o 100 años o mas aun, éramos iguales? …..NO nunca lo hemos sido, siempre hemos sido diferentes y del reconocimiento de esas diferencias, llego el gran pacto de la Constitución y del estado de las Autonomías que recoge en su Art. 2 la realidad de nacionalidades y regiones.
¿Fuimos iguales durante la dictadura?, Menos que nunca, Cataluña y el país vasco fueron las regiones mas industrializadas y con mejor nivel de vida del franquismo, también Madrid por ser la capital se llevaron todas las atenciones del régimen en lo económico. Sin embargo, el campo tuvo que emigrar y buscarse la vida, para salir de condiciones próximas al hambre.
Después en la democracia, la solidaridad entre territorios que también consagra la Constitución y la entrada en la UE, han permitido reducir algo las desigualdades territoriales, si bien la propia lógica del sistema económico capitalista premia a los territorios con mejor base tecnológica/industrial y con una burguesía mas dinámica, esto unido a su cercanía a Europa ha confirmado a Cataluña y el país Vasco y Navarra, como regiones fuertes.
En el caso del país Vasco y Navarra, la disposición adicional primera de la Constitución les reconoce sus derechos históricos de conciertos económicos y forales, ¿son privilegiados por esto? A mi juicio no, son diferentes y disfrutan de unas leyes que en su dia les costó muchísimo sacrificio conseguir…En Madrid no necesitan leyes históricas, es la capital de España y esto atrae como el imán a inversores y ricos de toda índole, lo que determina un trato también diferente que las derechas nunca reconocen, pero que puesto en comparación con los demás, tiene a mi juicio mas efectos reales sobre la economía.
Concluyendo el debate sobre desiguales o diferentes entre territorios, tiene una cosa clara somos diferentes y es bueno para la convivencia dentro del estado español que esas diferencias se reconozcan y se protejan como las lenguas.
La desigualdad se debe medir entre personas, entre hombres y mujeres y entre los niveles de protección de derechos como la sanidad y la educación pública, estas desigualdades se deben seguir combatiendo, desde todas las administraciones, pero ver mayores brechas de desigualdad porque se amplíen los niveles de autogobierno en territorios españoles, es un planteamiento falso, el centralismo nunca favoreció la igualdad real entre las personas.
Fulgencio Ruiz
