Como no se veía desde hace más de 40 años

Histórico y psicológico duelo en el Mundial de Ajedrez de Kazajistán

Por Fernando Bernardo

Ha llegado la nieve a Astana. Los parques lucen un manto blanco entre abedules y riachuelos, y sobre ese manto destaca la maravillosa pirámide del Palacio de la Paz y la Armonía, diseñada por Norman Foster.

El frió no ha repercutido en el ansia de lucha. Al contrario, el jugador con las piezas blancas ha porfiado por la ventaja, controlado el centro y desplegado un ataque por el ala de rey con el avance del peón de la columna h a h4 y h5. Y así lo han hecho tanto Nepo en la partida quinta como Ding en la sexta, con sendas victorias.

El ave mítica dorada de Kazajistán, el samruk, con sus alas desplegadas parece haber insuflado vida al tablero de ajedrez.

En las ruedas de prensa ambos jugadores muestran cautela. Tristeza contenida en las derrotas y alegría moderada en las victorias. Qué harán hoy, día de descanso? Respuestas breves, carencia de detalles, ninguna información para el rival.

Un duelo psicológico, correcto y combativo, como no se veía desde hace más de 40 años.

Fernando Bernardo