Jesús Antonio Rodríguez Morilla.- La no muy lejana caída de Mario Draghi supuso una gran sorpresa para Europa, ya que no parecía concebible que un político de su experiencia, expresidente del Banco Central Europeo, además de afamado profesional, pudiera sucumbir transcurrido aproximadamente un año desde su nombramiento.
Se han utilizado varios supuestos conducentes a su dimisión, entre ellos, como viene siendo habitual, los económicos de carácter inflacionista (8,4%); costes gasolina 95 octanos, 1.722 euros, no muy diferentes de los ya conocidos.
Tampoco resulta admisible, como elemento justificativo para su dimisión, el oponerse a una inversión entre 150 y 200 Mill. de dólares, coste de la construcción de un termo valorizador (incineradora) en una ciudad como Roma, que produce diariamente 4.600 toneladas de residuos.
Las verdaderas razones, posiblemente nunca las conoceremos, podrían residir, cuando un grupo importante en el Parlamento Italiano, como el Movimiento 5 Estrellas, se lleva consigo a más de 60 diputados, significa en Román Paladino, poner a Draghi, “a los pies de los caballos”.
Se imaginan Uds. en un ejercicio frío de ciencia ficción, que los aliados actuales de nuestro presidente, repito, hipotéticamente, se plantearan una acción similar cercana al fin de Legislatura, obtenido objetivos, y con todas las vergüenzas políticas expuestas.
Por otro lado, y, aunque de los resultados de las elecciones todo puede esperarse y de las italianas, más, donde sus nacionales, especialistas en acudir a las urnas, en esta ocasión llamados unos 50 millones, se palpa también desconfianza y hartazgo sobre los partidos políticos. Cuatro de ellos intentarán de nuevo con un “cuerno de abundancia” de promesas, recabar una fidelidad cada vez más desnaturalizada.
en definitiva, según los Medios, la misma desilusión que vive Europa por la situación económico-política, que probablemente ocasione una abstención alrededor del 40%, ante la recesión que comienza a olfatearse. Todo, con carácter contagioso.
La coalición derechista encabezada por Claudia Meloni, con impronta feminista, parte como favorita en las encuestas, para convertirse en la primera ministra del gobierno italiano, a pesar de la desinformación provocada y existente según fuentes italianas.
Enfrente, el Centro Izquierda Partido Democrático de Enrico Letta, junto a unos aparentes deslavazados partidos izquierdistas.
Mientras tanto, en España, ya han comenzado las precampañas con la clásica desinformación, y, aún nos queda más de un año ante un triplo de elecciones.
Jesús Antonio Rodríguez Morilla
Doctor en Derecho (Cum Laude)
Diplomado en Estudios Avanzados de la UE
Caballero de Mérito por Real Orden Noruega