Tomó la alternativa el pasado sábado en Manzanares con Morante de la Puebla como padrino y con Juan Ortega de testigo

El daimieleño Carlos Aranda logra tres orejas en su doctorado

Carlos Aranda logra tres orejas en su doctorado. El daimieleño tomó la alternativa en la tarde del pasado sábado en Manzanares con Morante de la Puebla como padrino y Juan Ortega de testigo.

El toro de la alternativa fue de capricho. Bonito, engatillado, bien hecho, y portador de embestidas humilladas y templadas.

Con esos mimbres Carlos Aranda se lució a la verónica con el capote, meciendo el percal. Alternó manos con la muleta, destacando con ambas, si bien su toreo al natural sobresalió, enroscándoselo con muy buen aire.

El de Daimiel cortó una oreja, que podrían haber sido dos de enterrar la espada en su totalidad en lugar de solo la mitad arriba. El toro fue brindado a su padre y su hermano.

La estocada llegó al primer intento y a su esportón fueron dos generosas orejas que le permitieron salir a hombros junto a Juan Ortega.

El doctorado de Carlos Aranda acontecido en la plaza de toros de Manzanares en la tarde del sábado se suma a las alternativas concedidas en este coso manchego, entre las que podemos citar las de Blanquito, Gabriel de la Casa, Juan José o, más recientemente, el también ciudarrealeño Emilio Huertas.