El Observatorio Contra las Agresiones del CGCOM recogió en 2021 un total de 612 agresiones a sanitarios, 171 más que el año anterior

El Colegio de Médicos de Ciudad Real organiza una charla coloquio sobre la figura del interlocutor policial sanitario

Joaquín Jiménez-Galanes Díaz-Mera, inspector, jefe de Seguridad Privada e interlocutor policial sanitario de la Comisaría Provincial de la Policía Nacional de Ciudad Real, y Francisco Javier Jiménez Bañales, capitán, jefe de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial e interlocutor policial sanitario de la Comandancia de la Guardia Civil de Ciudad Real impartieron ayer la charla «La figura del interlocutor policial sanitario en la lucha contra las agresiones a médicos», organizada por el Colegio de Médicos de Ciudad Real con motivo de los actos conmemorativos del día europeo contra las agresiones a médicos y profesionales sanitarios que se celebra el 12 de marzo.

Durante la presentación, la presidenta del Colegio de Médicos, la Dra. Mª Concepción Villafánez García, insistió en la necesidad de denunciar cualquier agresión, física o verbal que se produzca en un centro de trabajo. Que no se denuncien no quiere decir que no se produzcan. Así lo pone de manifiesto la encuesta interna y anónima que organiza cada año el Colegio de Médicos, donde se pide que se responda sólo y exclusivamente si han sufrido un ataque.


Paradójicamente, treinta y dos personas han respondido a la encuesta, y tan sólo dos han denunciado los hechos, una cifra muy alejada de las nueve agresiones comunicadas y gestionadas oficialmente desde la organización colegial. El Colegio, recordó la doctora Villafánez, ofrece “a los colegiados asistencia jurídica colegial gratuita, toda la información necesaria y se le guía y acompaña en todo el proceso a seguir desde la agresión hasta la resolución del conflicto”. Por lo tanto, concluyó la presidenta, “estamos sólo ante la punta del iceberg de las agresiones a profesionales sanitarios. Y para erradicar este problema hay que denunciar, hay que alzar la voz. Stop Agresiones y Tolerancia Cero”.

En 2017 se puso en marcha el Protocolo de Actuación Policial en Centros Sanitarios en la provincia de Ciudad Real, que entre otras medidas contemplaba la creación de la figura del Interlocutor Policial Territorial Sanitario, encargado de mantener un contacto fluido y más directo entre la entidad colegial y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en caso de agresión al personal sanitario. Tras cinco años funcionando, los interlocutores de la provincia hicieron balance de este periodo al tiempo que explicaron con detenimiento su misión en la lucha contra las agresiones a sanitarios. Asimismo ofrecieron herramientas para abordar a los pacientes violentos y propusieron medidas a implementar por las autoridades sanitarias para combatir este problema.
El mensaje es claro: La denuncia es imprescindible y hay que hacerla en los centros de trabajo, antes las fuerzas de seguridad y/o en el Colegio de Medicos. Además, hay que apostar por la concienciación y por la formación desde las instituciones correspondientes.

Datos nacionales del Observatorio de Agresiones

El Observatorio Contra las Agresiones del CGCOM recogió en 2021 un total de 612 agresiones, 171 más que el año anterior, lo que sitúa la cifra total desde 2011 en 5.649 agresiones.

De todas las agresiones sufridas el 62% corresponde a mujeres frente al 38% de los hombres, un dato que consolida la tendencia de los últimos años en los que las mujeres sufren la mayor parte de las agresiones.

El ámbito de la Atención Primaria, que supone más de 50% de los casos (51,1%) se mantiene a la cabeza de las estadísticas, seguido de los Hospitales que sube cinco puntos y se sitúa en el 22%; Urgencias de Atención Primaria (7,9%) y Urgencias de Hospitales (7,7%). Las agresiones en atención domiciliaria “in Itinere” suponen ya el 1,7% del total.

Respecto a los diferentes tipos de agresiones sufridas, en el 87% de los casos se produjeron insultos y amenazas, mayoritariamente a mujeres, mientas que el 13% restante fueron agresiones que acabaron en lesiones físicas, sufriéndolas en un 56% las mujeres y un 44% los hombres. Cabe destacar el aumento registrado en amenazas (+5,7%) y lesiones (+3,3%) en detrimento de los insultos (-9%).

De todas las agresiones recibidas y comunicadas acabaron en baja laboral el 13% de las mismas, cuatro puntos más que el año anterior. Además, también se observa un descenso en cuanto a daños materiales registrados durante la agresión, situándose en un 7% de los casos frente al 8% del año anterior. Asimismo, este año se registra un importante descenso en el número de agresiones realizadas de manera telemática. La cifra, que en 2020 era de un 29%, y en 2021 se sitúa en el 11%.

El 35% de las agresiones se producen por discrepancia con la atención médica recibida, el 9% motivadas por causas relacionadas con la COVID-19.

De nuevo la principal causa de la agresión es la discrepancia con la atención médica recibida que, aunque desciende respecto al año pasado, lo que supone el 35% del total. Aunque en menor medida, también son motivos de agresiones las discrepancias personales (14%); el tiempo en ser atendido (12%) y no recetar lo propuesto por el paciente (10%), entre otras. Las agresiones relacionadas con la COVID-19 sube dos puntos y se sitúa en el 9% del total. Destaca también el incremento del 5% al 9% en las agresiones relacionadas con la gestión de la incapacidad temporal (IT).

Respecto al tipo de ejercicio en el que se ha producido las agresiones en el año 2021, también mantienen datos similares a los de años anteriores con una clara preponderancia del ejercicio público (88%) frente al privado (12%). De todas las agresiones, el 92% se producen en horario y entorno laboral.

En la distribución por edades el informe resalta que las agresiones las sufren mayoritariamente los colegiados entre los 36 y 55 años (58%), siendo los dos grupos de edad que aumentan, en contraposición de los más jóvenes o más mayores que sufren un ligero descenso.

Otro dato que pone en relieve el informe de 2021 y que continúa con la línea ascendente de años anteriores es que cada vez más profesionales reciben apoyo por parte del centro de trabajo. En concreto en 2021 el 61%, cuatro puntos más que el año anterior.

Tipología de agresores

En cuanto a la tipología de los agresores en el año 2021, los datos muestran que son principalmente pacientes programados (48%), seguidos de los pacientes no programados (27%) y los acompañantes (22%), estos dos últimos grupos aumentan respecto al año anterior. Cabe señalar que en los tramos de edad inferiores a 40 años el perfil mayoritario es el del hombre mientras que en el tramo de 40 a 60 años son las mujeres las principales agresoras.

Cataluña, Cantabria, Extremadura y Andalucía registran el mayor índice de incidencia acumulada de agresiones

Por Comunidades Autónomas, es Cataluña donde se han comunicado mayor número de agresiones (210 en 2021), seguida de Andalucía con 135. Analizando la incidencia por Comunidades, es en Cataluña (5,3); Cantabria (4,1) y Extremadura (3,6), donde se registra la tasa de incidencia acumulada de agresiones superior, que en España se sitúa en un 2,2 por cada 1.000 colegiados.

Manifiesto del Observatorio de Agresiones del CGCOM

Como cada año, el Observatorio de Agresiones ha hecho público un Manifiesto en el que hacen un llamamiento a todos los agentes intervinientes para que tomen las medidas necesarias para proteger a los profesionales y, con ellos, al conjunto del sistema sanitario.

El Observatorio Nacional de Agresiones está formado por los doctores: José María Rodríguez Vicente, secretario general del CGCOM y responsable del Observatorio ante la Asamblea General; Dr. Gaspar Garrote, secretario general del Colegio de Médicos de Cádiz y portavoz del Observatorio de Agresiones; Manuel Muñoz García de la Pastora, presidente COM Ávila, y los secretarios de los Colegios de Córdoba, Rosa Mª Marín; Ourense, José Manuel Bendaña; y Zamora, Luis Alfonso Pérez.

El CGCOM, que agrupa a los 52 Colegios de Médicos de toda España, puso en marcha el este Observatorio a raíz de la muerte, en 2009, de la Dra. María Eugenia Moreno, una residente de 34 años que fue asesinada por un paciente cuando se encontraba trabajando en el Centro de Salud de Moratalla (Murcia).

Los datos que se presentan anualmente desde 2010 emanan de las comunicaciones que los médicos y médicas que han sufrido una agresión trasladan a sus respectivos Colegios. Estas cifras permiten disponer de una hoja de ruta común y conocer a fondo el mapa de la agresión en sus múltiples formas (edad, sexo, especialidad, entorno asistencial, ámbito de ejercicio, características del agresor, efectos colaterales, escenarios jurídicos y respuestas desde tribunales) al disponer de una casuística cercana de más de 5.000 casos.

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