La delegada de la Junta en la provincia de Ciudad Real, Carmen Teresa Olmedo, ha ensalzado las tradiciones que se celebran en todos y cada uno de los municipios de la provincia de Ciudad Real “ya que unen a los vecinos y vecinas y marcan la seña identidad de nuestros pueblos y ciudades”.
En este sentido, Olmedo, que ha participado este lunes de Pascua Olmedo, que ha participado en los actos con motivo de la festividad en honor de la Virgen de Criptana, ha indicado que “celebraciones como ésta constituyen un motivo de diversión y devoción y forman parte de nuestras tradiciones populares y de nuestras raíces como pueblo”
Olmedo ha agradecido la invitación realizada por la hermandad para acompañarles en esta ceremonia que desde hace 476 años se viene celebrando para venerar la imagen de la Virgen de Criptana y les ha felicitado por su trabajo ya que “la riqueza cultural y patrimonial y conservar las tradiciones de muchos de nuestros pueblos se mantienen y se transmiten a las generaciones más jóvenes”.
Una tradición que une el fervor y la religiosidad de los hombres y mujeres de Campo de Criptana que han vuelto a llenar la ermita durante la celebración de la Eucaristía y a la posterior procesión por su ermita.
Olmedo se ha referido a la conmemoración de los 800 años de la aparición de la Virgen de Criptana y que según reza la inscripción instalada en la ermita fue en el año de 1223 cuando a un labrador llamado Alonso Miguel con su mujer Esperanza, vecinos del pueblo de Villajos, se vieron deslumbrados y fijando al vista vieron con asombro una imagen de María Santísima, puesta sobre una piedra con su Hijo en brazos, vestida de estrellas e iluminando toda la montaña con sus brillantes resplandores, lugar donde se venera a la Imagen de la Santísima Virgen de Criptana, patrona de Campo de Criptana.
